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Letra Nueva

Estados Unidos: el sueño americano o la pesadilla global

Estados Unidos: el sueño americano o la pesadilla global

Durante muchos años los medios de comunicación masiva (fundamentalmente los americanos) se encargaron de difundir la idea de que Estados Unidos es la tierra de las oportunidades y donde los ciudadanos de cualquier país pueden cumplir sus sueños, pero ahora aquellos extranjeros que buscaban mejorías económicas en la tierra del Tío San ven convertidos sus sueños en pesadillas.

Desde hace unos años en los estados norteamericanos fronterizos con México proliferan organizaciones paramilitares encargadas de perseguir a los emigrantes latinos y ahora con la aprobación de la polémica Ley Antiemigrante de Arizona estos grupos xenófobos ven un respaldo legal a sus acciones.

A pesar de ser Estados Unidos una nacionalidad formada por la sangre y el esfuerzo de cientos de pueblos diferentes, hoy proliferan allí ideas racistas acerca de la superioridad del ciudadano WASP (White, Anglo-Saxon, Protestant) y el odio hacia aquellos que viven por debajo del Río Bravo. Quizás olvidan que ese sueño americano descansa sobre los hombros de una masa trabajadora mayormente extranjera.

La ley SB1070 de Arizona que promulgó la gobernadora Jan Brewer criminaliza la inmigración de indocumentados y obliga a los agentes policiales locales a hacer cumplir las leyes de inmigración federales.

Ahora toda la gran población de los estados mexicanos de Sonora y Tijuana que cruza a diario a trabajar o estudiar en pueblos del otro lado de la frontera se exponen a ser tratados como emigrantes y penados por esta legislación, ya que la ley de Arizona obligará a la policía a arrestar a inmigrantes indocumentados, sólo porque exista una "sospecha razonable". Y esta es una población flotante digna de tener en cuenta, pues se estima que más de 10 millones de personas viven y trabajan en el país sin la documentación adecuada.

El tema de la inmigración y la aprobación de la nueva ley ha dividido profundamente a Arizona. De un lado están los que protegen los derechos de los inmigrantes y aquellos que se sienten afectados por el influjo de latinoamericanos, principalmente mexicanos, a través de la frontera. Las protestan son casi a diario y ya hasta el propio Presidente Obama se ha expresado al respecto. En una ceremonia en la Casa Blanca para el otorgamiento de la ciudadanía a nuevos estadounidenses, Obama dijo que pidió a sus funcionarios ver de cerca la situación y "examinar los derechos civiles y otras implicaciones de esa legislación, ya que la Ley socava nociones básicas de imparcialidad que los estadounidenses apreciamos".

La medida podría afectar principalmente a miles de inmigrantes latinoamericanos que cruzan la frontera desde México y que son contratados por día en la calle. Pero los indocumentados no son los únicos que serían criminalizados en caso de que entre en vigencia la legislación conocida S.B. 1070. Todo aquel que transporte a una de estas personas estará cometiendo un crimen. Contratarlos también será ilegal.

Las protestas por la implementación de la Ley van desde los propios emigrantes, hasta Amnistía Internacional, que se manifestó porque la ley antimigrante de Arizona sea derogada y señaló su preocupación porque esa legislación es violatoria a los derechos humanos, tales como discriminación racial, arrestos y detenciones arbitrarias.

A su vez en México, el presidente Felipe Calderón dijo que su administración actuará en contra de lo que llamó la “absurda” e “inhumana” ley antiinmigrante en Arizona para defender los derechos de los mexicanos en Estados Unidos, y anunció la creación de una red de abogados en el país vecino del norte “para defender con la ley en la mano, con la propia Constitución estadounidense, los derechos de los emigrantes”.

Su declaración fue seguida de otra del dirigente histórico de la izquierda mexicana Cuauhtémoc Cárdenas, quien declaro que “La ley antiinmigrante es persecutoria y racista, de espíritu francamente fascista”.

Las protestas también abarcan otros países centro americanos que se verían enormemente afectados: la cancillería de Guatemala manifestó, a través de un comunicado, su "profunda preocupación por la ley SB1070, aprobada por la Cámara de Representantes y el Senado del estado de Arizona y promulgada por la gobernadora Jan Brewer". Por su parte, el Ejecutivo salvadoreño exhortó a la gobernadora "a que considere la preocupación expresada por los Gobiernos de Centroamérica y México" para adoptar una decisión sobre esta ley. El Gobierno salvadoreño indicó que en EE.UU. viven más de 2,5 millones de salvadoreños, muchos de ellos ilegales.

A pesar de múltiples protestas, muchos esperan a que hasta la implementación de la Ley a finales de este año se flexibilice o de vete en el Congreso Americano, ya que el tema de la emigración es tratado a nivel nacional con mucho tacto por las implicaciones que tiene para la nación. Pero de una cosa se puede estar seguro: el sueño americano se ha convertido en pesadilla y falta mucho para despertar.

 

1 comentario

Jonh Doe -

Ahora los policías tienes otros pretextos más para darle golpes a los latinos, antes por lo menos no tenían ese pretexto.